El tipo directo le pide ayuda a la sensual Emmi Accel, pero las cosas empiezan a ponerse un poco sensuales. Empieza a preguntarse con gran entusiasmo su apretada concha rusa y ella no deja ningún agujero sin explorar. La realidad y la fantasía se difuminan como parece cuando la unidad es tan intensa, el tamaño no importa.